Tantrico. Introducción (2. Técnicas)

A través del sexo tántrico podrás disfrutar de experiencias que de ninguna otra manera podrás disfrutar.

 Si tienes claro que tú y tu pareja queréis disfrutar de estas experiencias, puede ser una opción conocer algunas de las mejores técnicas del sexo tántrico. Para ayudarte, en este artículo te voy a mostrar las mejores alternativas, con el objetivo de que puedas abrir las puertas a una experiencia sexual y espiritual.

El objetivo de las técnicas del sexo tántrico es el de conseguir ser los mejores amantes a través del sexo, con el punto puesto en disfrutar al máximo del placer sexual frente al orgasmo. Para conseguirlo, es importante es importante realizar diferentes tipos de ejercicios tántricos y masajes en diferentes posiciones. De esta manera conseguirás aumentar el deseo sexual.

Masaje lingam

Este tipo de masaje se realiza en la zona genital masculina y no busca la eyaculación, sino que busca la relajación del hombre que está recibiendo este tipo de masaje. Es por ello por lo que la persona que está realizando el masaje debe encontrar nuevas formas de dar placer a su pareja. Para comenzar el hombre tendrá que acostarse de espaldas, con la cabeza levantada y los genitales expuestos. Una vez puesto en posición, la mujer tendrá que poner lubricante en la zona de los genitales y comenzar a masajear los testículos, para más tarde acariciar el hueso púbico y el perineo. Tras esto será el momento de comenzar por el pene, intercambiando ambas manos y finalizando acariciando la cabeza. Durante este tiempo es importante mantener la mirada entre ambas personas y que el hombre tenga una respiración ajustada para disfrutar de la mayor tranquilidad posible. Si el hombre lo desea, también se puede añadir un pequeño masaje en el interior del ano.

Masaje del Yoni

Es un masaje que va dirigido al placer de la mujer y su relajación. Como en el caso anterior, este tipo de masaje no busca principalmente el orgasmo, sino que busca la relajación y el placer. Para conseguir tener éxito, es muy importante que la mujer se relaje, por lo que se recomienda realizar siempre en un entorno que transmita tranquilidad. A la hora de realizar este masaje, es importante que la mujer que va a recibir el masaje se acueste de espaldas, con la cabeza ligeramente elevada y con las piernas abiertas para dejar al descubierto los genitales. Ahora es el momento de que el hombre se siente entre las piernas de ella en forma de loto y ambas partes comenzarán una sesión de respiración. Ahora comenzará el masaje. Este debe comenzar por las piernas para pasar a las ingles, pechos, estómago y finalmente el hombre se deberá ir acercando a la zona genital. Ahora será el momento de poner lubricante en la zona vaginal. El masaje en esta zona deberá ser lento y suave, para más tarde dar paso a acariciar el clítoris. Este masaje deberá realizarse de manera circular en una dirección y en otra. Finalmente se deberá introducir uno o dos dedos para buscar el punto G, sin dejar de estimular el clítoris. No olvides que todo esto se deberá realizar con la mirada puesta el uno al otro.